La chica de (ayer) hoy ©by mabm

 

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La chica de ayer hoy

Se despereza el alba… Incipientes rayos de sol juegan con sus pestañas. En la habitación de al lado un grupo de niños ríe a mandíbula batiente, pero ella se quiere morir. Lo sabe, sabe que debería comerse el mundo, pero ahora solo desea que el mundo se la coma a ella. Se hace un ovillo entre las sábanas y se abraza a sí misma hasta que suena la alarma en su móvil. Entonces se incorpora, más muerta que viva, se sienta en su tocador frente a un espejo en el que apenas ya se reconoce y comienza su metamorfosis: se pinta la cara con pinturas de guerra y ensaya su mejor sonrisa…

Al despertar el día, juguetones rayos de sol jugaban con sus pestañas y ella, traviesa, se hacia la dormida. En la calle podían oírse risas pueriles que contagiaban a todo aquel que las escuchaba y se echaba a reír, feliz. Lo sabía, sabía que quería comerse el mundo, incluso galaxias enteras. Se desentumecía en la cama batiendo brazos y piernas como haciendo un ángel de nieve y dejando las sábanas hechas un ovillo hasta que sonaba la alarma en su móvil. Entonces se incorporaba como un torbellino, más viva que nunca, y se sentaba frente al espejo de su tocador que le devolvía una espléndida sonrisa.

Marzo 2019