Luces de neón ©by mabm

Adam Kiyoshi Fujita

 

Imagen de Adam Kiyoshi Fujita

 

Hoy más que ayer pero menos que mañana… O puede que le demos la vuelta a la tortilla y sea hoy menos que ayer pero más que mañana… y pasemos página en el calendario y en nuestra historia. Pero puede también que una ráfaga de viento, caprichosa, nos devuelva a la página inicial.

Tal vez las inclemencias atemporales del tiempo, a rebufo de las agujas del reloj con las que nos cosimos las heridas, hayan borrado solo algunas letras. O quizás palabras enteras dejando líneas en blanco como las que ahora adornan nuestro cabello.

Pero puede que me equivoque, ojalá lo haga, y todo sea resultado de la mente de un escritor barato escrita en un libro de bolsillo abandonado en la mesita de noche de un hotel de carretera. Y lo que llamábamos nuestro, si es que alguna vez lo fue, solo fue una sombra producto de las luces de neón. Y tú, que dijiste haberte enamorado hasta los huesos, desconocías que ella era la típica que siempre esperaba en las paradas de autobús de solitarias carreteras secundarias con los brazos las piernas abiertas y el corazón cerrado.

Abril 2019